Por favor, solo déjenme morir en paz.

Sangre borboteando en mi cuerpo deseando salir por mis frágiles muñecas, mis largas uñas me arañan con rabia como intentando arrancar toda la piel de mi cuerpo. Dolor, dolor, dolor, dolor, lo siento tanto y tan intensamente, mi propia mente no me deja ni un minuto de descanso entre tanto pensamiento oscuro y desquiciante.
Resuenan las voces de mi cabeza queriendo llegar hasta mi boca para pegar un majestuoso grito, pero de mis cuerdas vocales no sale nada, las palabras se enredan entre mi lengua y caen por mi garganta ahogándome en silencio, ¿Será esto lo que llaman "angustia"?
No hay sonidos, solo respiraciones entre cortadas y los latido de mi desgastado corazón bombeando sangre como si no hubiera mañana, retumban entre mi pecho como una bomba de relojería antes de estallar.

Las ganas de continuar con esto que los humanos denominamos "vida" se disipan en cada sórdido amanecer de mi alma. No quedan ni razones que inventarse para continuar en esta tragicomedia, y la idea de un estado de ataraxia introducido por un sueño eterno siempre ha sido tentador.
Acabare ahogándome en un mar de llantos y de palabras que nunca pude pronunciar o seguiré con vida hasta que mi endeble cuerpo deje a mi mente rendirse de esta insufrible agonía que transita por todo mi ser. 



Por favor, solo déjenme morir en paz. 

Comentarios

Publicar un comentario

Entradas populares